
Miguel Micó tiene muchas razones para estar enojado con la dirigencia de Racing, llegan pocos, se van muchos y la ida de Romagnoli fue la gota que rebalsó el vaso. Cuentan que el entrenador estalló luego de recibir la noticia y eso lo llevó a terminar de decidir algo que venía pensando. Irse del equipo de Avellaneda al ver que su plantel se achicaba y debilitaba. También que hayan tomado otros rumbos varios referentes del plantel lo enojó mucho. Se enteró que el volante se iba al Toluca e inmediatamente le comunicó la decisión a sus colaboradores, luego a los jugadores. Encima sus pretenciones en cuanto a refuerzos no fueron cumplidas como tampoco su deseo de que no se vaya nadie.
Los hinchas del equipo celeste y blanco podían ilusionarse con las primeras actuaciones de su equipo este año, ya que se notó a los jugadores, en su mayoría juveniles, con más confianza pese a la derrota con River, esta noticia sin embargo atormentó.
Restaba esperar, la crisis de Racing es profunda y al parecer no había bien que por mal no venga.
Pero de Tomasso logró lo que parecía imposible: convencer al entrenador de que continuase en su cargo. Estuvieron reunidos varias horas y Micó seguirá en su cargo hasta próximo aviso.
Restaba esperar, la crisis de Racing es profunda y al parecer no había bien que por mal no venga.
Pero de Tomasso logró lo que parecía imposible: convencer al entrenador de que continuase en su cargo. Estuvieron reunidos varias horas y Micó seguirá en su cargo hasta próximo aviso.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario